miércoles, 15 de septiembre de 2010

No da igual

Hace unos días, una amiga luego de leer el relato de nuestro parto me comentó que le pareció todo muy lindo pero que ella ni loca hubiese esperado tanto. Yo por dentro pensé: "-Eso decís ahora pero ¿no harías lo mejor por tu hijo?"

Siempre queremos para nuestros hijos lo mejor. Buscamos al mejor obstetra para atendernos durante el embarazo, la mejor clínica donde parirlos, elegimos la mejor marca de mamadera, de chupete, de cochecito, de cuna, de hamaca, de pañales, etc. Pensamos y re-pensamos cual es la mejor guardería y luego la mejor escuela para mandar a nuestros niños. Y así somos con infinidad de cosas. Pero a mi parecer es poca la gente que tiene en cuenta que es lo mejor para el bebé en el momento del nacimiento.

Son frecuentes los debates entre grupos de mujeres de si es mejor una cesárea o un parto natural. Basta con dar una recorrida por algún foro y nos encontraremos con un ejemplo. Creo que hay que respetar la decisión de cada mamá de elegir el parto que quiere pero el problema es que también deberíamos tener en cuenta qué es lo mejor para nuestro bebé. Y al respecto parece no haber mucha información. De lo contrario, el número de cesáreas innecesarias no debería ser tan alarmante.

Si una mamá supiese los riesgos de las cesáreas y la importancia de ese momento en la formación del carácter y personalidad de su hijo, se informaría y no dejaría que le hagan una cesárea si no fuese verdaderamente necesaria.

Quiero aclarar dos cosas antes de seguir:
1) No estoy en contra de las cesáreas, ni de los avances en la medicina y la tecnología. Sí estoy en contra de su abuso.
2) No creo que una madre que haya pasado por una cesárea, necesitado la epidural, no haya podido amamantar a su bebé o no duerma con él sea una mala madre, no quiera o quiera menos a su hijo. No pienso mal al respecto, no culpo, ni juzgo. Estoy segura que todas queremos lo mejor para nuestros chicos y actuamos de la mejor manera posible para lograrlo de acuerdo a nuestras necesidades , nuestra historia y las circunstancias. En todo caso, en ocasiones, nos creo víctimas de la desinformación, de la mala información y de las creencias sociales y culturales.

Que cada vez más mujeres elijamos un parto fisiológico y no medicalizado no es para hacernos ni las rebeldes, ni las hippies, ni las originales, tampoco es parte de un desafío a nosotras mismas ni a la medicina ni a nadie.

Además de ser una experiencia inigualable poder ayudar a nacer a tu hijo, verlo salir de adentro tuyo, ser la protagonista de ese momento y poder disfrutarlo a cada instante, qué demás está decir no es poca cosa, la razón fundamental por la que elegimos un parto natural respetando nuestros tiempos y el de nuestros hijos es principalmente por ellos.

¿Y porqué por ellos? Porque sabemos que la forma en que se nace tiene relación con nuestra personalidad y futuro comportamiento social.

“Lo vemos [al nacimiento ] a través de los ojos de la madre y es su alegría la que despierta nuestra simpatía. Suponemos que el niño no siente nada, que es un espectador inocente del acontecimiento. Lisa y llanamente esto no es verdad. Para su madre y su padre, su nacimiento puede representar un recuerdo imborrable, la satisfacción de un sueño de toda la vida; sin embargo, para el propio niño es mucho más trascendental, un acontecimiento que se estampa en su personalidad. Su modo de nacer -doloroso o fácil, tranquilo o violento- determina en gran medida su futura personalidad y cómo verá el mundo que le rodea. Tenga cinco, cuarenta o setenta años, una parte de su ser siempre mirará el mundo a través de los ojos del recién nacido que una vez fue. Por ese motivo, Freud denominó << emociones primarias >> al placer y al dolor que acompañan el nacimiento. Ninguno de nosotros logra escapar totalmente a su influencia." *
(Cliquea AQUÍ para leer más sobre la experiencia del nacimiento para el niño)


Creo que todos coincidimos en que el mundo en el que hoy vivimos no está pasando por un buen momento y nos gustaría un mundo mejor para nuestros hijos. Sin violencia, depresiones, adicciones ni desamparo, un mundo más feliz donde reine la paz, el amor, la generosidad y la amabilidad. Y ese mundo es posible, no pertenece sólo al mundo de hadas. Podemos lograrlo y de hecho depende pura y exclusivamente de nosotros. Estoy convencida que si cambiamos la forma en que nacen nuestros hijos y la manera de criarlos vamos a lograr un mundo mejor.
(Para leer más al respecto les recomiendo este excelente artículo: "PAZ Y CRIANZA: ¿dónde nace la violencia?")


Es momento de dejar de echar culpas... El cambio empieza por uno y en nuestras casas. Puede que nadie lo vaya a notar, que no seamos reconocidos ni salgamos en los diarios y que nadie nombre nuestra labor, pero silenciosamente vamos haciendo la revolución.

Sé que es una tarea nada fácil derrumbar un paradigma con otro tan opuesto. Pero de a poquito lo iremos logrando. Ya no parecerá de hippies parir a un bebé en la intimidad y tranquilidad de nuestras casas, ya no parecerá horroroso ver a un nene de dos años tomar la teta ni raro ver llevar a los bebés en "bolsas" (cómo una vez oí comentar a una señora cuando iba llevando a Isidro en un portabebés en forma de cuna).

Yo con el sólo hecho de salir a la calle con mi hijo en la quepina siento que estoy haciendo la revolución, ayudando a cambiar el paradigma. Estoy segura que de a poquito otras mamás al verme sentirán curiosidad y se irán animando a probar y así irán descubriendo las ventajas de portear y los beneficios que tiene para sus bebés. Ya me hace feliz cuando me paran en la calle para preguntarme donde conseguí el fular o para hacerme algún comentario al respecto, ni me quiero imaginar lo feliz que voy a estar cuando vea a alguien porteando en mi ciudad. Y ojalá algún día lleguemos a ser muchos, a tal punto de que lo normal sea ver bebés cargados en portabebés y lo raro el uso de cochecitos.

Para eso es necesario que se sepa que no da igual vivir un embarazo consciente y conectado con tu bebé a que no, que no da igual la forma de nacer, que no da igual ser amamantados o no ni por cuanto tiempo, que no da igual el tiempo que les dediquemos a nuestros bebés ni la atención que les brindemos, que no da igual el tiempo que tardemos en responder a sus demandas, que no da igual dejarlos llorar o no, que no da igual que pasen demasiadas horas en sus cunas, catres, cochecitos, sillitas, hamacas o corralitos en vez de estar en contacto con el cuerpo de sus madre (su verdadero hábitat). Todo esto va a repercutir en el futuro carácter del bebé y su modo de enfrentar la vida.  
(AQUÍ para descargar un tríptico sobre apego, llanto, colecho y crianza en brazos)


Afortunadamente, hoy en día la ciencia a través de sus estudios e investigaciones certifica y promueve la crianza natural e instintiva pero sin embargo sigue siendo difícil hacer reflexionar a la sociedad sobre la importancia del trato que reciben los niños en sus primeros años de vida. 

Igual de complicado a hacer entender a una abuela o bisabuela (o por lo menos a las mías) que uno ya comió suficiente y no tiene más hambre es hacerles entender que tener un bebé en brazos no es malcriar ni mal acostumbrar, que es su necesidad hasta que logre su propia movilidad y autonomía y que malcriar, a mi parecer, es todo lo contrario: abandonar, dejar solos. Que colechar (dormir con tu bebé) además de ser muy placentero también es otra necesidad de todo mamífero. Basta con observar como duermen los cachorritos: uno encima del otro al lado de su mamá. Hacerlas entender que la leche siempre es buena en calidad y la cantidad va a depender de las veces que pongamos a nuestros bebés en la teta (por eso para producir mucha leche debemos darles a libre demanda, a mayor succión mayor producción) y que los bebés pidan pecho muy seguido no significa que nuestra leche no los llene, la teta también es contención, seguridad y muchísimas otras cosas más, pueden tan sólo querer estar cerquita de sus mamás. Es momento de poner punto final a los mitos y mensajes provenientes de creencias populares que se vienen transmitiendo de generación en generación y que muchas veces entran en contradicción con los deseos de las madres y las necesidades de los bebés.      

Creo que también es necesaria una mayor circulación de información. Una vez que se acceda a ella, quedara en cada uno ignorarla o hacer algo. Darle importancia o que le parezca un disparate. Pero para poder elegir es necesario tener información. 




*VERNY, Thomas y KELLY, John. La vida secreta del niño antes de nacer. Editorial Urano.

14 comentarios:

  1. Nuestro cochecito nos es muy útil, para llevar la ropa del lavaropa a la soga porque yo tengo los brazos ocupados con mi bebé Martina!

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  2. estás invitada a escribir en Mujeres Kbuskan en mi blog.

    si te apetece enviame un mail a kebuskasblog@gmail.com

    besos desde España

    Merche

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  3. Muy interesante, con tu permiso me la llevo al resumen semanal de blogs de Bebés y más.

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  4. Ana!! Me dio mucha risa tu comentario... Cuando lo empecé a leer pensé que era en defensa de los cochecitos y criticando lo que yo había escrito. Después resultó todo lo contrario.
    De paso aclaro que tampoco estoy en contra de los cochecitos sino que también de su abuso. Un beso grande!!

    Merche!! Muchas gracias por la invitación. Me gusta mucho tu blog. Te escribo. Cariños!!

    Armandilio!! Por supuesto que tenés mi permiso, es un honor para mí. Gracias y saludos!!

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  5. yo sigo arrepintiendome de no haber tenido un parto natural, pero la verdad no me alcanzaba la plata para pagarlo, esa es la unica contra que le encuentro a los partos humanizados y es que son muy caros! pero por todo lo demas son hermosos..
    pero bue.. lo que te queria contar es de un caso de una chica q conozco por face que no podia esperar a la fecha de parto y se hizo hacer una cesarea por lo ansiosa que estaba.. despues cuando cumplio un año se lo festejo 2 dias antes tambien! y aparte enseguida la envio a la guarderia siendo que ella no trabaja
    es un caso que siempre me causo mucha nostalgia por la bebe ya que pobrecita la mama por lo visto no piensa mucho en ella.

    y realmente hay muchisimas mujeres que actuan asi :(

    besitos

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  6. Deberíamos hacer algo para que las obras sociales cubran los partos hogareños!! Hay que moverse pero es tan difícil, no se por donde empezar!! Ojalá toda esta movida que hay en FB y la red de mujeres que se esta formando ayude a cambiar las cosas.

    Sinceramente me causo gracia lo que me contaste!! Parece un chiste!! Yo no lo puedo creer!! Que disparate!! Realmente una tristeza, no tengo otra cosa que decir... Lo lamento por ambas...

    Besitos!!

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  7. sii marti! podriamos empezar juntando firmas.. queres? a traves del facebook y de tu blog, y elevarlas a las autoridades de salud, estoy segura de que muchas mujeres se van a sumar!

    La idea seria lograr que las obras sociales cubran los partos humanizados, y pedir porque se respeten los derechos de las mujeres al parir, que sean escuchadas y que en los cursos pre-partos enseñen todas las opciones que existen para dar a luz no la que "los medicos impusieron por su comodidad". Habria que lograr que el incumplimiento de la ley que ya existe tenga consecuencias que hasta hoy no las tiene porque los medicos no la respetan.

    es un lio pero podriamos intentarlo..
    te propongo que pienses en lo que te gustaria pedir, lo hables con otras mama y yo hago lo mismo por aca, y despues redactamos una peticion ¿si?

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  8. Gii... Podría ser... Ojalá pudiésemos lograr algo. Es difícil pero no imposible. Hace un tiempo me uní a una causa sobre el tema en FB:
    http://www.causes.com/causes/132968
    Voy a buscar información. Tenemos que averiguar más antes. En esa causa de FB comentaron que ya existe una ley y que las obras sociales deberían cubrir los honorarios de un parto hogareño.
    La verdad que no se. Nos mantenemos en contacto. Cualquier novedad escribime,lo mismo hago yo.
    Besotes Gii!!!

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  9. Hola, Martina: Te felicito por el hermoso parto que tuviste pero sobre todo por lo que luchaste para que sea tal cual fue. Soy Gisela, mamá de Lucio, que nació el 12 de abril de 2010 por cesárea, pero en este caso, lamentablemente necesaria. Tuve herpes al inicio del tercer trimestre y ese ya es motivo para programar una cesárea ya que el bebé corre riesgo de contagio. No me quedé solo con lo que el obstetra me dijo, sino que busqué información en varios lugares y la indicación siempre fue la misma. La cesárea fue bastante buena, estuve acompañada por mi pareja después de la peridural, no estuve atada y el desempeño del equipo médico fue bueno (no estuvieron hablando de fútbol, mujeres y esas cosas que me han dicho que a veces pasan). El tema fue después, porque Lucio aspiró líquido amniótico y lo llevaron a neo (me dejaron verlo antes, pero yo temblaba como una hoja, producto de la anestesia y no pude tenerlo en brazos); ahí empezó el problema por la gran desconexión entre la parte de maternidad y neo de la clínica. NADIE nos dijo a qué hora podíamos ver a nuestro bebé, por lo que el primer día pasó la hora de visitas sin que nosotros vayamos, yo como pude me levanté con suero y todo apenas pude caminar pero como estaban haciendo controles a los demás bebés ni siquiera me dejaron pasar a verlo a través de un vidrio. Gracias a que nos quejamos todo el tiempo y a mi obstetra que no me abandonó, conseguimos que la neonatóloga fuese a la habitación a darme un informe sobre el estado de mi bebé. Si a fin de cuentas no estaba "grave" ni corría "riesgo de vida", ¿por qué no lo había podido tener aún en brazos? Me dijeron que esperara un día más, que le iban a sacar el suero y el oxígeno, porque, obviamente no lo había podido tener en brazos y mucho menos, darle la teta. Ya en neo, al día siguiente me indicaron que me empiece a sacar leche con un sacaleches espantoso que me lastimó toda... apenas unas gotas me salieron. Gracias a Dios, al día siguiente Lucio ya estuvo en una cunita, sin suero ni oxígeno, solo con una via con antibiótico que le habían puesto preventivamente (ese es ooootro tema!!). Cuando lo tuve en brazos por primera vez, él ya tenía 4 días y se prendió al pecho como si SIEMPRE hubiese mamado... realmente increíble. fue gracias a todo lo que me había informado y a que nunca desistí, que pudimos continuar (y todavía lo hacemos)con una lactancia exitosa, sin grietas ni complicaciones. Lucio permaneció en total 10 días en neo, creo que innecesarios, pero que hubo que completar porque los tratamientos con antibióticos no pueden interrumpirse...
    Con respecto al parto en sí, como ya dije, mi cesárea fue necesaria, pero seguro que con un parto normal hubiese podido estar más fuerte para mi bebé, especialmente cuando tenía que ir 5 veces al día a la clínica a alimentarlo. Una cosa que me llamó la atención fue que todas las mamás que ibamos a neo habíamos tenido parto por cesárea (no hablo de aquellas cuyos bebés estaban graves, sino de bebés como Lucio que habían sufrido complicaciones en el momento del parto). Curioso, no? Recién a los 30 días pude caminar sin molestias y me tomó otro mes más poder levantarme de la cama sin que me duela (por suerte Lucio duerme pegadito a mí!)
    Bueno... me fui por las ramas... un gusto encontrarte en la web, ya que somos de la misma ciudad (te dejé un mensaje en FBK donde te cuento de dónde te conozco). Seguro que nos reconoceremos por el portabebé, jaja! Solo te vi a vos y hace muy poco a una chica que entró a un negocio porteando a su beba de dos días!! Me dio emoción!!
    Cariños desde acá nomás, Gisela y Lucio

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  10. Gisela!!!
    Hola!!! Qué alegría saber que estamos cerquita... Algún día me encantaría organizar un encuentro de mamás y bebés nicoleños para conocernos y pasar un lindo rato!!!
    Te agradezco tus lindas palabras acerca de mi parto... Y también tengo que felicitarte a vos por lo fuerte que debes haber sido esos diez días lejos de Lucio y por haber logrado darle la teta y no haber bajado los brazos. Se perfectamente que en las clínicas de San Nicolás la mayor parte del personal no coopera con el tema lactancia por no decir directamente que en varias ocasiones dan consejos que van totalmente en contra de los 10 pasos para una lactancia exitosa escritos por la Liga de la Leche.
    Sinceramente lamento que hayas pasado por una cesárea pero es bueno saber que recibiste buen trato y pudiste estar acompañada de tu marido. Leyendo tu comentario no pude evitar que se me llenaran los ojos de lágrimas... Me pongo en tu lugar y me imagino que deben haber sido terribles esos días mientras Lucio estaba en neo pero me reconforta saber que están recuperando ese tiempo en que estuvieron separados con mucha piel con piel: Mucha teta, colecho y porteo y de a poquito va a ir sanando esa herida... Ojalá que sea muy prontito :)
    Es difícil saber si esos días en neo fueron realmente necesarios. Yo también lo dudo. A mi antes de que elija la clínica me advirtieron que en la Clínica San Nicolás para poder mantener neo abierta y con la misma cantidad de empleados sin echar a nadie mandaban a muchísimos bebés sanos con cualquier excusa. Y una madre sensible luego del parto y ante el miedo que le provocan los médicos sin dudas que va a aceptar que lleven a su bebé a una incubadora porque obviamente que no quiere que le pase nada malo. Es terrible saber como por negocio y dinero juegan con nosotros. Me da mucha impotencia.
    Yo por esa razón elegí la UOM pero también deja que desear. Lució en qué clínica nació??
    Ojalá nos crucemos prontito!!! De que color es tu portabebe?? Así te reconozco si te cruzo... Me hubiese encantado ver a esa chica con la beba de dos días, que emocionante!!!
    Cariños para ustedes también y un beso para cada uno... Martina.-

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  14. Hola Martina! me encantó todo lo q escribiste... me pasa lo mismo q a Gi rosario con respecto a la plata, no me queda otra q parir x mi obra social.. mi primer parto fue muy parecido al tuyo, aunque sí me hicieron episiotomía y me rompieron la bolsa artificialmente en la clínica... ahora tengo fecha para el 25/3 y decidí tenerlo también por parto "lo más natural" posible... aunque hay gente q dice "como vas a hacer, si en la clinica te hacen lo que ellos quieren?" yo respondo "quedandome en mi casa hasta q las contracciones sean cada 5 minutos x al menos más de 1 hora, como el parto pasado... aunque sea un trabajo de parto de 48 hs como el anterior"... y una conocida mía neonatóloga me dijo "la vez pasada te salió bien el chiste, pero mirá si por esperar tu hijo se encaja x ser muy grande y no puede salir... pero bueno, si querés que se muera tu hijo es problema tuyo..."
    Es increíble como la gente parece sentirse "molesta" cuando una se "rebela" y "desobedece" lo que la sociedad médica instaura como rutinas... ahora tengo un poco de miedo, pero es verdad que parir y sentir que tenés el control de tu parto te levanta tanto la autoestima que crees que, después de eso, podés con cualquier cosa... así que haré caso a lo que mi instinto salvaje me dicte cuando llegue el momento y luego decidiré qué es lo mejor para mi bebé y para mi...
    Gracias por compartir todo esto, porque muchas mujeres podemos sentir que no estamos locas y sobre todo, no estamos solas!
    Guadalupe

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